El tiempo se detuvo y se quedó solo sin amar... instantes no vividos, despiadado su pasar, mientras el reloj de la vida marca cada segundo, lacerando la piel, arrebatando la libertad.
(pintura Aldo Luongo) Penumbra acompasando el clamor de los sueños, unión de astros y conjuros en el cielo azul inmenso, mientras la noche se enciende acariciando el ensueño, y en el sutil velo del insomnio el hechizo se hizo dueño...